Se prestaba un día algo nublado pero gracias a la frescura y simpatía de Laura y Juanca junto con sus invitados, no dejó lugar a dudas, las imágenes hablan por si solas, fue un boda divertida y espontánea boda, donde los invitados cobraron protagonismo haciendo partícipe a los novios en el restaurante Simó de Palau.
Sin duda un privilegio poder realizar un reportaje a gente tan simpática y cercana. Gracias Laura y Juanca por ponerme tan fácil fotografiar vuestro día.